En entradas anteriores recibimos un comentario no
relacionado con la entrada del blog en la que se posteó, pero que es un tema
muy interesante que teníamos pensado plantear esta semana en la que debatimos
nuestro blog en clase. Así pues, después de algunos posts de situación
contextual pasamos a realizar una reflexión sobre el marco teórico que rodea a
la situación actual de los medios de comunicación en España, y la relación que
por ende se establece con su forma de financiación básica: la publicidad.
Después de estudiar un texto del Dr. Ramón Zallo, observamos
que dentro de los últimos procesos reguladores del sector audiovisual en
España, podemos destacar tres etapas:
1. Durante
el gobierno de Aznar, los medios de comunicación (tanto privados como públicos)
eran afines al PP, por lo que la balanza informativa estaba desequilibrada.
2. Por
ello, durante la primera legislatura de Zapatero, se encargó de cambiar esto.
Para ello aprobó una ley que permitía que un canal por cable pudiese ser
emitido en abierto, lo cual provocó el nacimiento de Cuatro. Además,
aprovechando el surgimiento de la TDT (tema debatido anteriormente en clase) se
permitió la licencia a un nuevo canal: La Sexta, equilibrando la balanza, ya
que estos dos canales son de tendencia progresista. Como vemos, la política
influye en los medios de comunicación.
3. Durante
la segunda legislatura de Zapatero se aprobó la ley 7/2010 General de
Comunicación Audiovisual, la cual supone las siguientes modificaciones:
Se permiten fusiones de los
grandes grupos de comunicación (primero Mediaset añade a Cuatro y luego Antena
absorbe La Sexta, a pesar de sus diferentes ideales políticos). Esto provoca
una tendencia al oligopolio, porque además al fusionarse pueden superar el 27%
del share, cosa que antes estaba prohibida. La siguiente clave, y la que más
afecta al tema principal de este blog es la limitación de la televisión pública
(TVE) mediante su reducción de ancho de banda al 25% y sobretodo, la
eliminación de la publicidad. Esto se debe a que la gran calidad de la
televisión pública hacía que se llevara la mayoría de la audiencia, y por lo
tanto, la mayor inversión publicitaria. La justificación viene de que en el
resto de Europa es así, porque se considera que no ha de buscar beneficios
económicos. Además, como bien ha comentado nuestro compañero Javier Márquez,
tiene limitados los eventos deportivos, que son un producto muy jugoso para las
televisiones (bajo coste de producción y altísimas audiencias), por lo que
aunque ahora retransmite la Champions League, deja libre para las privadas
Mundiales de fútbol, Eurocopas de baloncesto etc…
Como vemos, la publicidad incide en el funcionamiento de los
medios de comunicación y viceversa. Esto tiene un claro motivo: el económico,
que hoy en día prima sobre todas las cosas. El surgimiento de la TDT provoca la
fragmentación de audiencias, y con ello si bien la publicidad se beneficia a la
hora de segmentar el target, pierde gran número de impactos. Por otra parte, la
retirada de la publicidad de TVE se realiza en favor de las privadas (que como
contraprestación financian a la cadena pública con un 3% de sus ingresos).
Además éstas se fusionan para ganar más audiencia que la competencia, la cual
sólo importa si se traduce en dinero gracias a la publicidad.
¿Los medios de comunicación pueden condicionar a la
publicidad o viceversa? ¿Qué opináis al respecto? Porque si algo está claro es
que, aunque sea un matrimonio de conveniencia, uno no puede vivir sin el otro.
Lady Mildret
En relación con la eliminación de la publicidad en la televisión pública, si que hubo quejas, porque TVE aumentó la audiencia durante largo tiempo haciendo que el precio de los espacios publicitarios presionasen a la baja. Por tanto, el efecto que consiguió en un primer momento fue, a mi parecer, dañino para las privadas.
ResponderEliminarSin embargo, no es incompatible la existencia de publicidad en la cadena pública y la defensa de los valores de las cadenas públicas; podría limitarse a la mitad los espacios publicitarios de las cadenas públicas con respecto a las privadas. Esto permitiría una financiación secundaria que no cubriría gastos pero que aliviaría déficit sin comprometer la razón de existencia de la televisión pública.
Sr. Verde
¡Hola a todas!
ResponderEliminarEstá claro que con la llegada de la TDT la cantidad de canales de televisión han aumentado, encontrándonos con varias cadenas de una misma empresa. Esto puede parecernos positivo como telespectadores, pues la variedad de contenidos aumenta y con ello la posibilidad de elección. Sin embargo, la oferta de más canales supone un aumento de la publicidad. Si bien en la televisión analógica se buscaba un equilibrio de calidad entre contenidos y publicidad, ahora es necesario “rellenar” huecos, y creo que de esta manera la televisión acabará inundad de “publicidad basura”, ya que no es posible producir tanto y siempre con la máxima calidad. ¿No creéis?
Las posibles soluciones a este problema son las cadenas que sólo emiten publireportajes sobre utensilios de cocina, limpieza y métodos de adelgazamiento que se repiten continuamente; o el caso de Antena 3 que cuenta con 3 canales (Antena 3, Antena Neox y Antena Nova), y emite los mismos anuncios a la vez. Como consecuencia, los espectadores van a la competencia durante los cortes publicitarios, pudiendo de la otra forma cambiar de canal sin dejar la compañía.
Y por otro lado, están las cadenas de TVE, que no se puede emitir publicidad. Esto significa que deberán rellenar los huecos con más programación, pero ¿será de la máxima calidad toda esta programación? Es un círculo vicioso.
Eli Arana (Be l'ou de l'any)
La publicidad sin duda tiene un papel muy importante en los medios de comunicación, ya que ésta es su principal por no decir única fuente de financiación para poder sobrevivir, por lo que no podemos negar la relación existente entre ambos, publicidad y medios de comunicación tanto convencionales como no convencionales. La radio, la prensa, la televisión se financian prácticamente con publicidad, aunque Internet según expansión.com es el único medio que ha aumentado en inversión publicitaria en los últimos años, la inversión publicitaria en dicho medio creció en 2008 un 26%, con esto nos damos cuenta de como la publicidad es la materia básica de subsistencia para los medios de comunicación tradicionales. Sin embargo, cabe decir que la publicidad también necesita de los medios de comunicación, es decir, se requieren mutuamente, cada uno por sus intereses, pero tienen que convivir juntos. Los anunciantes necesitan ingresos y para ello deben anunciarse e insertar sus anuncios en los diferentes medios de comunicación para así poder incrementar sus ventas y su notoriedad, y los medios de comunicación necesitan financiación para poder seguir realizando su cometido como elementos informativos que son.
ResponderEliminarRespecto a la pregunta que se plantea de si los medios de comunicación pueden condicionar a la publicidad o contrariamente, considero que ambos se condicionan, condicionan su funcionamiento, me explico. La publicidad condiciona el “producto” en nuestra industria, es decir, el hecho de que por ejemplo el sector audiovisual esté siempre dependiendo de ésta, hace que se vea afectado y eso repercute en el funcionamiento de dicho sector. Pero como habíamos dicho antes, tanto la publicidad como los medios de comunicación se condicionan mutuamente. Por una parte, la cantidad de inversión publicitaria que se realice en los medios afectará a la calidad del medio en general pero también a la calidad de su contenido así como a la cantidad de oferta respecto a programas, series, películas, informativos en televisión; a programas musicales, informativos, concursos en radio; a la calidad de imagen en las revistas o la profundidad de las noticias en la prensa, etc.
Un claro ejemplo de como a veces la publicidad institucional influye en el funcionamiento de algunos medios como televisión, prensa es cuando algún organismo público le “dice” a un medio que insertará publicidad en su medio, si éste habla bien de dicha institución, y si no lo hace no invertirá en su medio, en estos casos la publicidad institucional está actuando como una moneda de cambio y esta tendencia perturba el buen funcionamiento, la ética, los principios de los medios de comunicación. Por otra parte, en cuanto al condicionamiento de los medios de comunicación sobre la publicidad, simplemente decir que según el tipo de medio que sea, según las características de cada uno, permitirá al anunciante realizar un tipo de formato u otro, además éste se deberá ajustar a las particularidades de cada medio y tenerlas en cuenta, pero también puede aprovecharse de ello y sacarle el mayor provecho.
Nessa Elensar
También me gustaría comentar por encima la influencia que ejerce la política en el sistema audiovisual español, y esto se muestra con las tres etapas que se mencionan en el post que resumen muy bien los procesos reguladores del sector audiovisual en España. Además, viendo estas etapas se refleja la presencia del “modelo pluralista polarizado” (modelo de intervención pública sobre el sistema audiovisual español que forma parte de las políticas de comunicación), las características de dicho modelo entre otras son: el papel activo del Estado en la legislación del sistema mediático, medios de comunicación muy integrados en el sistema político, paralelismo político –en la teoría los medios de comunicación se proclaman independientes, en la práctica actúan de acuerdo a un partido político- muy acusado en este modelo… Pero, Hallan y Mancini afirman que cada vez hay una mayor tendencia hacia otro modelo, es decir, que se está produciendo una convergencia de este modelo al modelo liberal en el que sobre todo prima la lógica comercial/empresarial y se deja de un lado la ideología, dos ejemplos que confirman esta tendencia son la fusión entre Telecinco y Cuatro, y entre Antena3 y La Sexta, que aunque en ambos casos cada cadena pertenecía a grupos de comunicación con una ideología bastante diferenciada, este hecho no fue un inconveniente a la hora de fusionarse.
ResponderEliminarNessa Elensar
La adhesión de España a la Comunidad Europea implica el compromiso de actualizar la legislación española en aquellas materias en las que ha de ser armonizada con la comunitaria.
ResponderEliminarEl Consejo de las Comunidades Europeas aprobó con fecha 10 de septiembre de 1984 una directiva relativa a la armonización de las disposiciones legislativas, reglamentarias y administrativas de los países miembros en lo que afecta a la publicidad engañosa.
La legislación general sobre la materia está constituida en España por la Ley 61/1964, de 11 de junio, por la que se aprueba el Estatuto de la Publicidad, norma cuyo articulado ha caído en gran parte en desuso, por carecer de la flexibilidad necesaria para adaptarse a un campo como el de la publicidad, especialmente dinámico, y por responder a presupuestos políticos y administrativos alejados de los de la Constitución.
Las circunstancias precedentes aconsejan la aprobación de una nueva Ley general sobre la materia, que sustituya en su totalidad al anterior Estatuto y establezca el cauce adecuado para la formación de jurisprudencia en su aplicación por los Jueces y Tribunales.
La publicidad, por su propia índole, es una actividad que atraviesa las fronteras. La Ley no sólo ha seguido las directrices comunitarias en la materia, sino que ha procurado también inspirarse en !as diversas soluciones vigentes en el espacio jurídico intereuropeo.
El contenido de la Ley se distribuye y establece las disposiciones generales y las definiciones o tipos de publicidad ilícita. En él se articulan las diferentes modalidades de intervención administrativa en los casos de productos, bienes, actividades o servicios susceptibles de generar riesgos para la vida o la seguridad de las personas.
Javier Márquez